Congregar, agasajar, convidar, disfrutar, compartir… eso expresa la mesa que se sirve para celebrar la Navidad. En una noche tan especial, en la que el pesebre al que llegará el Niño Dios y el árbol con los regalos a sus pies son los protagonistas, se les une la cena navideña.
A través de su decoración y de las viandas que allí se sirvan demostramos cariño y generosidad por nuestros familiares y amigos, por eso no hay que descuidar ni un solo detalle.
Hay diferentes estilos de arreglarla, de acuerdo a la personalidad de los anfitriones, pero acá les damos algunas ideas para que se inspiren y arreglen su mesa para la cena –o almuerzo u onces– del 24 de diciembre, –o antes–, pues al fin y al cabo es la más especial del año y debe ser radiante e impactante.
Pero antes algunos consejos:
* El mantel blanco siempre será el más elegante y se decora con detalles navideños en tonos rojos, verdes o metálicos como el dorado y el plateado.
* En lo posible, evite las servilletas de papel, las de tela siempre serán más elegantes.
* Si los invitados van a estar sentados a la mesa puede marcar cada puesto con una tarjeta con el nombre de cada uno. Así se asegura de que queden bien distribuidos.
* Fíjese que los adornos como floreros y candelabros no interfieran con la comunicación entre ellos. Sí es un mesa bufé no hay problema con el tamaño.
* Evite los aromas artificiales fuertes para que no interfieran con los de la comida y las bebidas que va a servir.
* Las velas siempre darán un toque elegante y a la vez acogedor, asegúrese de que sean de larga duración porque no tendrá tiempo de estar reponiéndolas. O puede aprovechar y decorar con las lamparitas con luces led, que resultan más seguras si hay niños cerca.
Que no falte el rojo y verde
Una mesa rústica para una celebración acogedora, cálida y relajada, en la que el rojo y el verde son los protagonistas.
El tradicional pino y las rosas rojas son el punto de atención para un arreglo de mesa central, con algo de hojas secas para un toque de cabaña, bosque y chimenea.
Un mantel en cuadros escoceses ayuda a este estilo hogareño y tradicional.
La vajilla roja, sin decoración, complementa esta propuesta de Rosas Don Eloy, que extiende el tema de floral a las servilletas de tela. Unos candelabros de plata en los extremos dan un toque de brillo.
Flores utilizadas: rosa roja, beso rojo, ‘black magic’ y aleluia.
Oro rosa para brillar
Muchas familias celebran la Navidad con un almuerzo o unas onces. Esta propuesta de Rosas Don Eloy es perfecta para una reunión en la que la luz del día hará brillar esos detalles puestos con cariño en la mesa.
El oro rosa es el protagonista de esta propuesta, uno de los tonos que se ha impuesto en la última temporada gracias al rosa cuarzo, el color que predominó este año, según el Instituto Pantone que lo eligió para reinar en el 2016.
Esta combinación logra un toque sofisticado y femenino a la vez.
Los arreglos florales combinan rosas en este color con otras en tonos vino tinto y follaje verde. Inspirada en un invierno romántico, el toque del candelabro y la cubiertería en dorado o cobre complementan esta decoración.
Flores utilizadas: dáforas rosadas, astilbe, alelí crespo rosado, crisantemo crespo rosado, minirrosa mayólica, gardenia y gohetias blancas.
La acogedora luz del cobre
Hechizoo y Miscelánea Popular tienen una estética que se inclina por la tradición y en este mes de tradiciones proponen una mesa que congrega a la familia y amigos, que tal vez vienen de otras regiones para reunirse en un mismo espacio. Por eso la mesa involucra objetos hechos a mano de diferentes partes del país: platos en tejido rollo de Guacamayas, individuales de cobre y crin de Mongolia, canasticos del Pacífico para los mecheros, objetos antiguos como los pájaros del arreglo central, que evocan a los abuelos y muchas velas.
“Quisimos hacer una mestizaje de materiales y gentilicios, por decirlo así, para crear un espacio donde todos caben”, dice el arquitecto Jorge Lizarazo.
Elegancia
Como si una nevada acabara de pasar y dejara sus copos de nieve sobra la mesa, así es esta decoración propuesta por la tienda de complementos Matisses de Medellín. Blanco y dorado para una ambiente sobrio, elegante y formal, que recuerda la Navidad invernal de otras latitudes. Son colores que permiten resaltar los alimentos, así como la cristalería transparente para las bebidas.